El principio del fin

No sé ustedes, pero para mí y mi familia fueron días de muchas corridas. Que tu tía, que mi tía, que los amigos, que las llamadas por teléfono, que las compras, que la comida, que la ropa, que la plata y en fin! De todo para cumplir con lo requerido para esta época del año.

No es lo que tenía pensado, para el blog, esto de escribir sobre cosas taaaan cotidianas y trilladas pero es lo que hay por hoy. Encima se me junta lo laboral; el cierre del 2007 más lo cercano de las vacaciones y dejar todo al día, así que no pude respirar profundamente y relajarme un poco para postear algo interesante en el blog.

Entonces aprovecho para desearles un 2008 provechoso en afectos y proyectos para quienes se acerquen a este humilde sitio y lea esta "sarta de cotidianeidades".

Sólo un dato que agrego como curiosidad antes de terminar. Ayer, regresando con mi familia a casa, desde nuestro vehículo diviso un gran cartel que se mostraba, a modo de deseo, desde el departamento de un edificio para quien lo divisara: "SE FELIZ". Comparto con este habitante el mismo anhelo para todos.

Hasta pronto